Cerramientos acristalados.
¿Estás pensando en instalar un cerramiento acristalado en tu hogar o negocio? En Airclos te ayudamos a comparar y elegir entre los tres principales productos que ofrece el mercado para este fin.
Las puertas plegables de aluminio son, junto con los techos móviles y fijos, el producto estrella de nuestra gama. Las puertas plegables son la opción más versátil para el acristalado de porches y terrazas. Nos encantan especialmente por:
Si quieres disfrutar de las vistas, sin prescindir del aislamiento y la hermeticidad, este es el sistema ideal.
Las cortinas de cristal son un sistema de acristalado sin juntas verticales que permite al usuario disfrutar de un espacio totalmente cerrado sin perderse ningún detalle de las vistas. Esto es lo que lo hace el rey de los cerramientos acristalados para porches y terrazas.
Nos gustan especialmente para climas cálidos o templados, donde el aislamiento y la hermeticidad no son importantes. Las elegiremos cuando estemos buscando un sistema que proteja la estancia frente al polvo, el viento y el agua, pero sin restar ni un ápice de transparencia.
Si nuestra prioridad es conseguir una transparencia total para disfrutar de las vistas, este será nuestro sistema.
Las correderas verticales nos ofrecen un combinado de ventajas muy interesante frente a las dos opciones anteriores. Se trata de un sistema que ofrece un gran aislamiento térmico y una total estanqueidad, todo ello con unos vidrios horizontales de hasta 4m de ancho para disfrutar de unas amplias vistas panorámicas.
Lo que nos encanta de este sistema es su forma de deslizarse verticalmente, con lo que no ocupa ningún tipo de espacio en la sala. Este innovador sistema permite su apertura tanto hacia la parte inferior como hacia la parte superior.
En la apertura hacia la parte inferior, cuando el sistema de ventana de guillotina está abierto se mantiene a una altura de seguridad óptima, haciendo las veces de una barandilla. En la apertura hacia la parte superior, las hojas cuelgan desde arriba, permitiendo el paso bajo el sistema.
Elegiremos este sistema cuando contemos con poco espacio para la apertura y maniobrabilidad del sistema, o cuando necesitemos que una vez abierto nos sirva como barandilla.